Además, tres de cada 10 encuestados registraron Covid persistente, es decir, síntomas que duran, al menos, dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo
69% de los mexicanos que tuvieron la infección por SARS-CoV-2 recibieron atención en servicios privados, la mayoría, en consultorios de farmacias. (Foto: iStock)
¿Después de la Covid-19, presentaste alguno de los siguientes síntomas: fatiga, dolores en músculos o articulaciones, dolor de cabeza, pérdida o disminución del olfato, dificultad para respirar, fiebre, pérdida o disminución del gusto, dificultad para dormir, pérdida de peso, falta de aire, ansiedad o dolor en el pecho?
El 62% de los mexicanos presentaron secuelas después de haber sido dados de alta o un mes posterior al inicio de la enfermedad por SARS-CoV-2 y 34% tuvieron Covid persistente, es decir, síntomas que duran, al menos, dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo.
Estos son lo primeros datos que hay en México acerca de las secuelas por el SARS-CoV-2 y fueron revelados por la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2021 Continua sobre Covid-19, coordinada por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
La encuesta también detalló que el 69% de los mexicanos que tuvieron la infección por SARS-CoV-2 recibieron atención en servicios privados, como consultorios adyacentes a farmacias y otros no regulados.
La Ensanut se realizó durante agosto y noviembre de 2021 en una muestra de 12,619 hogares en los 32 estados de la República Mexicana.
La Ensanut documentó –por primera vez– datos oficiales acerca de las secuelas por Covid-19 y reportó que 61.6% de los mexicanos presentaron síntomas, después de haber sido dados de alta o un mes posterior al inicio de la enfermedad por SARS-CoV-2.
Algunas de las secuelas registradas por los pacientes son:
Además, 34.4% de los encuestados registraron Covid persistente, es decir, síntomas que duran, al menos, dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo.
De la población con secuelas de la Covid-19, el 19.2% indicó que estas le han impedido cuidarse por sí mismos. En localidades rurales, el porcentaje de personas que no puede salir de casa a causa de las secuelas es de 41.4%.
El 69% de los pacientes con secuelas recibió atención en servicios privados y corresponden a la población sin seguridad social y del sector informal.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez destacó que “una de las lecciones aprendidas a raíz de la pandemia es que existe una enorme desigualdad social en México, donde seis de cada 10 personas viven en condiciones de pobreza y ello es resultado de la concentración de la riqueza“.
El 69% de los mexicanos que tuvieron la infección por SARS-CoV-2 recibieron atención en servicios privados. La investigadora Arantxa Colchero explicó que la atención privada no corresponde a los grandes hospitales, sino a consultorios adyacentes a farmacias (CAF) y otros no regulados.
“Hay una falsa percepción de que la atención es más rápida, pero no hay evidencia de mayor calidad que en el sector público. Además, los CAF reciben incentivos para prescribir medicamentos y tienen médicos menos calificados, lo que representa un mayor gasto para las familias”, indicó.
La mayoría de personas que recurrieron a este tipo de consultas son aquellos sin seguridad social (65%) o de poblaciones rurales (68%).
La consulta privada que recibió la población con SARS-CoV-2 se dividió en:
Desde 2018 la Ensanut ha registrado un aumentó en el uso de servicios privados en personas sin derechohabiencia de 60 a 69%.
Arantxa Colchero Aragonés, investigadora de la Dirección de Innovación de Servicios y Sistemas de Salud del Centro de Investigación en Sistemas de Salud del INSP, detalló algunas de las características que hicieron más susceptibles a estos estados: “había menor probabilidad de cumplir las medidas de mitigación de la Jornada Nacional de Sana Distancia en los hogares donde el jefe o la jefa de familia tiene bajo nivel socioeconómico y escolaridad”.
Colchero indicó que estos resultados apuntan que es necesario garantizar la cobertura universal de salud efectiva para la población sin seguridad social, destinar recursos suficientes al sector Salud e invertir en la prevención para reducir la carga de enfermedad.
Los servicios privados a los que recurren los mexicanos no están regulados, reciben incentivos para prescribir medicamentos y tienen médicos menos calificados. (Captura de pantalla de Ensanut)