Carlos Javier de León y Miranda, director general del software, explica cómo funciona su termómetro del estrés y brinda algunos consejos para atracarlo.
Para muchos, el home office es una fuente de estrés adicional. (Foto: iStock)
Inició la pandemia y con ella, una nueva forma de trabajo: home office. La frontera donde terminaba la jornada laboral y comenzaba nuestra vida personal desapareció. La carga de trabajo se incrementó y –en algún punto– todos apagamos la cámara en las conferencias, nos perdimos el contacto. ¿Cuál es el resultado? Estrés.
México es el segundo país que más horas labora de acuerdo al último informe de Perspectivas de empleo país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). En nuestro país, el promedio de horas trabajadas al año es de 2,255, es decir, unas 43 horas a la semana.
Según estas cifras, Merca2.0 estableció que al menos 30 % por ciento de los mexicanos, trabaja entre 45 y 50 horas a la semana. Es decir, antes de la pandemia tres de cada 10 personas tenían sobrecarga de trabajo.
“Ahora el home office ha incrementado esa cifra al 50 %, cinco de cada 10 tienen sobrecarga de trabajo. Esta nueva forma se ha convertido en uno de los indicadores de riesgo por estrés”, dice Carlos Javier de León y Miranda, director general de SICOSS, un software que mide el estrés laboral y te dice cómo solucionarlo.
El año pasado entró en vigor la NORMA Oficial Mexicana NOM-035-STPS-2018 Factores de riesgo psicosocial en el trabajo-Identificación, análisis y prevención.
La NOM 035 establece multas por un mal ambiente laboral y provocar estrés en los empleados que van desde 250 a las 5,000 unidades de salario, es decir de 26,000 a medio millón de pesos, “y éste sería el menor de los costos que la empresa tendrá en caso de tener estrés laboral”, dice Carlos Javier de León.
El otro costo es el de inversión, “si tú tienes un trabajador con exceso de trabajo o con un mal clima laboral, eso te cuesta y además te contamina a los demás. Por ejemplo, si decide renunciar, lo que te lleva entrenar a uno nuevo y volver a tener la organización funcionando al 100 % es de tres a seis meses del salario de ese trabajador. En promedio de 60,000 a 70,000 pesos”, explica el director general de SICOSS.
Pero, el costo más delicado son los riesgos y problemas con el trabajador porque el estrés tiene reacción física y mental. Un trabajador con una sobrecarga de estrés puede terminar en una hospitalización o de un tratamiento que es costoso.
“Por lo que medir, evaluar y solucionar el estrés en una corporación no es un gasto, es una inversión”, asegura de León.
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El software SICOSS es una plataforma que te ayuda a calcular la nómina y la seguridad social desde hace 50 años. Como software, tiene 35 años de experiencia. El año pasado implementaron un Business Intelligence que ayuda a las empresas a evaluar el estrés laboral y además a solucionarlo.
La nómina brinda contacto con los empleados porque a ellos se les hace llegar el recibo de pago.
“Cuando salió la NOM035 pensamos, ¿qué pasaría si a través de este software que ya es un canal de comunicaciones abrimos y empezamos a medir el estrés laboral. Así que pusimos todos los cuestionarios e hicimos un producto balance”, dice el director de SICCOS e ingeniero electrónico.
La aplicación te permite aplicar los cuestionarios de la manera que mejor te acomode: digital o impresa. Después el Business Intelligence basado en Inteligencia Artificial (IA) analiza la gran nube de información, da un estatus y permite asesorarte para tomar las acciones pertinentes.
“Dijimos: ya están mis cuestionarios ahora vamos a darles las manera de solucionarlo. Ahí entran nuestros expertos a evaluar cada caso y a brindar las herramientas”, dice Carlos.
Carlos Javier de León y Miranda, director general de SICOSS, un software que mide el estrés labora y te dice cómo solucionarlo.
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Cuando comenzó la pandemia, SICOSS decidió hacer a toda la empresa 100 % remota, es decir: teletrabajo. La primera evaluación después de esto, arrojó que tenían buen ambiente laboral, buena percepción de sus jefes, pero había incrementado la carga laboral.
Carlos Javier de León que la pandemia vino a sumar un factor de riesgo los tres que ya se tenían identificados. Al estrés laboral, al mal clima y a los jefes se agregó el teletrabajo.
“Se agregó trabajo porque la frontera donde termina el oficina y la vida personal no quedo muy bien marcada y además se le agregó crisis económica y el riesgo de perder el empleo”, explicó.
Estas son algunas de las recomendaciones que aplicaron para atacar el problema:
“En un punto de la pandemia a todo el mundo le dio por apagar la cámara. No nos vemos, no hay contacto, no puedes evaluar cómo están tus compañeros: tristes, deprimidos, descuidados. En vital verse cara a cara”, dice Carlos.
Nada puede urgir tanto. Se debe marcar la frontera de inicio y fin del trabajo.
En SICOSS estos minutos los usan para tener una rutina de baile, contar chistes, hacer ejercicio, o contar anécdotas.
Juegos que incentiven la risa para relajar las tensiones.
Para quien lo necesite con todas las seguridades.
“Yo no permito que se disculpen si uno de sus hijos llora. Tú estás en tu casa, nosotros somos los intrusos”, indica de León.
En SICOSS, por ejemplo, se envió a todos los trabajadores un desayuno y en la video conferencia estuvo prohibido hablar de trabajo. “Fue un éxito así que lo replicamos en noviembre con pan de muerto y leche”.